Es de recibo esta imagen con el centro de la ciudad al fondo.
Más de lo mismo en este enlace
PRESUPUESTO PARA TODOS LOS BARRIOS: 2.8 MILLONES DE EUROS, Y UN SÓLO PROYECTO HEREDADO DEL PP QUE ES UN LUJO Y NO HACE FALTA A LA CIUDAD, CÓMO ES SOTERRAR EL BARRANCO GUINIGUADA 150 MILLONES, PRESUPUESTO TOTAL.
Nota: Aunque la inversión masiva en grandes proyectos se ha corregido algo debido a la presión ciudadana, se mantiene la crítica porque era la principal prioridad del actual grupo de gobierno PSC - Compromiso al principio del mandato.
Priorizan las zonas céntricas igual que hacía el gobierno anterior. Según la prensa van a destinar 430.000 euros a adecentar fachadas de la calle Triana. La periferia está en peor estado señor Saavedra.
El Ayuntamiento hace pequeñas obras y el tubo sobrante va a parar a las laderas y ahí se queda de por vida.
¿CULEBRA GIGANTE O CARENCIAS EN INFRAESTRUCTURA BÁSICA Y FALTA LIMPIEZA? ¿ZONAS VERDES O LADERAS REGADAS CON AGUAS FECALES?
ESPACIOS LIBRES QUE EL PLAN GENERAL PREVÉ PARA EQUIPAMIENTOS, SAAVEDRA PREFIERE QUE LOS VECINOS DISFRUTEN DE LA TIERRA SECA O QUE SE CONVIERTAN EN ESTERCOLEROS ANTES QUE GASTARSE UN EURO PARA DOTAR AL BARRIO DE PLAZAS O APARCAMIENTOS.
LADERAS SUCIAS IGUAL QUE EN LA ETAPA DE LUZARDO.
Previstas inversiones astronómicas en grandes proyectos, pero niños y mayores han caído por riscos dado que Ayuntamiento no hace paredes para quitar los peligros
2 comentarios:
Una pena todo esto. Con un poco de interés por parte de los ayuntamientos...
Un saludo.
(javier)
Publicado en La Provincia 18 Enero 2009.
Los expertos advierten de que urge actuar en los Riscos para acabar con su aislamiento
TERESA GARCÍA - LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. No hay más que subir por el callejón de La Gloria, en el risco de San Nicolás, a un tiro de piedra de Triana, para entrar en otro mundo de extrema marginación y pobreza. Los Riscos de San Nicolás, San Juan y San José continúan siendo una especie de islas marginales en pleno centro de la ciudad, debido a sus características topográficas pero, sobre todo, a la marginación y pobreza que han sufrido durante siglos.
Un grupo de arquitectos consultados por este periódico plantean la necesidad de desarrollar una batería de actuaciones para recuperar estos barrios históricos, poner en valor su condición de espectaculares miradores y acabar con su aislamiento del resto de la ciudad. Para ello plantean acciones urbanísticas, rehabilitación y reposición de viviendas, creación de equipamientos, dotaciones y mecanismos que hagan el barrio más accesible. Pero todos coinciden en la necesidad de hacer hincapié en la intervención social.
La integración de los Riscos no se conseguirá, según el arquitecto Juan Torres Alemán, sin acciones encaminadas a resolver la problemática social y económica de la zona. "Lo primero que habría que intentar", explica, "es lograr que se sientan parte de la ciudad, porque padecen unas carencias importantes y estamos hablando de servicios elementales". En su opinión, la integración de estos barrios es una cuestión que "se debería abordar con urgencia. Hay que hacer que las familias que viven ahí se sientan identificadas con la ciudad, con sus casas y calles" , algo que se consigue mejorando su entorno. Para ello, "hace falta un conjunto integral de acciones , donde la arquitectura y el urbanismo juegan, sin duda, un papel importante. El problema ya está detectado y lo que hace falta es actuar. La gente está deseando a veces que le indiques el camino y en cuanto ven un resultado es la propia gente la que crea la dinámica de cambio en los barrios".
El arquitecto José Antonio Sosa está convencido de ello y dice que "lo primero que habría que hacer es instalar en los Riscos equipamientos capaces de atraer al resto de la población". Esta sería, sostiene, "la mejor alternativa para conseguir que estos barrios se integren en la ciudad". Dotaciones culturales y de ocio, pero también mejorar las comunicaciones con escaleras mecánicas y ascensores. "Hay que hacer", sostiene, "una rehabilitación a fondo que haga fácil que la gente pueda vivir allí, porque se trata de espacios privilegiados dentro de la ciudad por las vistas impresionantes" que tienen.
MICROCIRUGÍA. Menos optimista se muestra el urbanista Eduardo Cáceres, quien coincide, sin embargo, con Torres Alemán y el arquitecto Juan Manuel Febles, en que el de los Riscos "no es sólo un problema urbanístico sino social y económico". Tanto Cáceres como Febles entienden que es preciso realizar una "actuación de microcirugía. Hay que ir casa por casa y resolver los problemas de saneamiento, accesibilidad y de las propias viviendas. Es una labor", explica Cáceres, "muy costosa y muy difícil y desde el punto de vista electoral no se ven los beneficios a corto plazo. Se trata de una asignatura pendiente de toda la vida por esta razón y seguirá ahí". En opinión de Febles, "lo primero que hay que lograr es que sean espacios dignos para vivir y para ello es preciso hacer estudios de situación de cada uno".
El arquitecto Juan Ramírez Guedes resalta, por su parte, el "secular olvido y marginación" que han sufrido estos barrios, pese a que "juegan un papel central en la constitución de la identidad urbana y paisajística" de la capital. Hace falta, añade, un "proceso de rehabilitación interna" en la que se respeten los "signos de identidad" del espacio. "La ciudad", advierte, "no se puede permitir tener áreas como los Riscos en estas condiciones y es clave resolver los problemas sociales y de habitabilidad para que no se conviertan en territorio comanche".
Para la arquitecta Míriam Castro es preciso "hacer intervenciones que propicien que los Riscos se integren dentro del sistema de recorridos de la ciudad y que incrementen el espacio público de estos barrios". Así, plantea crear en San Nicolás un "sistema de espacios públicos y zonas verdes que sirvan de conexión entre la parte alta y la baja, lo que además permitiría al barrio servir de bisagra entre Triana y la zona de Miller". Esta actuación, añade, se complementaría con recorridos peatonales, mediante escaleras mecánicas y ascensores que permitirían incrementar los servicios y mejorar la calidad de vida de los residentes.
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